Esa pequeña jaula que es Logroño
Esa pequeña jaula que es Logroño.
Mi imaginación es ya una fotografía,
No deja nada al azar.
Vuela como un autobús, ruta fija.
Recuerdo sus formas
Como si fueran las de una amada.
Tengo un maldito álbum de fotografías dentro.
Con los ojos cerrados
Podría llegar hasta mi tumba.
Sé los pasos que hay desde mi casa
Hasta el próximo dolor.
Ojalá sentir dolor en otras calles.
Evito los atajos
Porque no quiero recordar que los sé todos.
Cementerio de ilusiones.
Abro correos que no me dicen nada.
Sé los correos que me van a llegar.
Conozco a la prima del cartero
Y a dónde va a comprar el pan.
Siempre alegrándome por los que se van,
Rogando a los que se quedan,
Adorando a los que vienen.
Las tonterías me salvan,
Son mis vacaciones a otro lugar.
Ella es el cielo,
Aunque nos lo están empezando a cercar.
He visto crecer chopos,
Haciéndose más altos que el lugar
Donde moribundo.
Podía ver los fuegos artificiales
por encima de ellos,
verde desesperanza.
Un mundo ya sin detalles,
No hay sorpresas.
Esa pequeña jaula que es Logroño
Y que podría ser la misma vía láctea.
Quizás esté cansado de mí
Y de ver la misma alcantarilla
En la misma sombra.