Me meto un tiro,
¡Pum!
El eco suena,
¡Pum!
O quizás es el corazón,
¡Pum!
Que todavía sueña.

Categoría: Otros

Discurso completo sobre el rock and Roll de Dave Grohl

Discurso completo sobre el rock and Roll de Dave Grohl

Sacado de Portalternativo

“Siempre habrá bandas de rock’n’roll, siempre habrá chavales a los que les encantarán los discos de rock’n’roll. Viajo por todo el mundo y toco música y es fácil pensar que el rock se ha marchada cuando estás en un país como América (del Norte). Justo volvemos de un viaje por el ‘Down Under’, hicimos una gira por Australia y Nueva Zelanda a la que llevábamos 40.000-50.000 personas por noche, llenando estadios. Eso significa que el rock’n’roll está sano y bien. Algo que nunca se irá es la conexión que haces con una banda o canción donde te conmueve el hecho de que sea gente real la que hace la música. Haces esa conexión humana con una canción como ‘Let It Be’ o ‘Long And Winding Road’ o una canción como ‘Bohemian Rhapsody’ o ‘Roxanne’, cualquiera de esas canciones. Suenan a gente haciendo música.
En América, el rock’n’roll no está en la primera página del ‘mainstream’ como en el resto del mundo. Inglaterra es otro país donde las bandas de rock tienen tremendo éxito: las oyes en la radio, tienen éxitos y tocan en estadios y parece casi como que (el rock) es más grande que nunca (por ahí). Pero, por la razón que sea, aquí en América no hay tanta atención para las bandas de rock’n’roll. No sé lo que es pero es uno de los pocos países donde el rock’n’roll no es gigantesco.”
Asegura que “una de las razones por las que seguimos siendo una banda y seguimos haciendo álbums y seguimos teniendo éxito es porque no prestamos atención a nada de eso. Tenemos nuestro propio estudio, nuestro propio sello y lo hacemos todo a nuestra manera y según nuestros principios. Para nosotros lo más importante es estar satisfechos en la banda y una vez terminamos de hacer un disco, se lo damos al resto del mundo. Pero siempre hemos vivido en esta preciosa burbuja que es Foo Fighters. No puedes reventarla, no puedes cambiar lo que hacemos porque tratamos que siga siendo real y puro. Hemos visto pasar toda clase de modas -nu metal, corbatitas- y seguimos con la cabeza gacha y haciendo lo nuestro durante tanto tiempo que nada de eso realmente importa y al final, lo que pasa es que acabamos haciendo álbumes con los que la gente conecta porque son discos reales.
Pero no, nunca ha sido un problema. Durante años, normalmente una vez al año, tienes una banda de rock que sale y dice, ‘Vamos a salvar el rock’n’roll’ y luego lees un artículo preguntándose, ‘¿Está muerto el Rock?’. Creo que nunca se irá. Pregúntale a los chicos de AC DC a ver si está muerto el rock’n’roll.
Debido a cosas como ‘American Idol’ y emisoras de radio que ponen música hecha completamente por ordenadores es fácil olvidar que hay bandas con gente de verdad tocando instrumentos de verdad que molan. No creo que para los fans vaya a irse nunca. No conozco a mucha gente que deje de escuchar rock. Joder, parece estar bastante vivo y bien.”
“Tienes que entender que somos una banda realmente simple,” prosigue. “Pensamos que somos una mierda y tratamos de hacer buenos discos y ensayamos. No nos sentimos como la banda más grande del mundo. Nos sentimos los cinco capullos que salían de gira en una furgoneta hace 17 años, eso no ha cambiado. Pero hubo un momento, hace 10 años, en que nos pedían tocar en una ceremonia de premios o en un festival de una radio o algo así y éramos la única banda de rock. Ahí estábamos en un cartel con artistas de pop como Pussycat Dolls o algún rapero nuevo y salíamos nosotros le sacábamos todo a los instrumentos.Y empecé a preguntarme, ‘¿Por qué estamos aquí?’ Me imaginaba si simplemente necesitaban ‘una banda de rock’ -’¿Cual es una banda de rock? Llamad a Foo Fighters’. Entonces empecé a pensar que quizá representemos algo para la gente, quizá cuando oyen el nombre Foo Fighters piensan en rock’n’roll y pensé, ‘Guau, eso mola’. Luego, con el paso de los años y conciertos, miraba al público y veía a chavales con camisetas de Nirvana y sus padres con camisetas de Foo Fighters -cosa que parece el mundo al revés- y veía mostachos y chavales en su primer concierto de rock. Nuestro público se hizo tan diverso que pensé, ‘Tío, solo quieren ver un concierto de rock’. Vete a ver a Bruce Springsteen. Vete a ver a Tom Petty, AC DC, Roger Waters, a cualquiera de ellos. Vete a ver a Pearl Jam o Soundgarden. Fui a ver a Soundgarden hace cuatro o cinco meses; no estuve en la zona VIP, me metí ahí dentro y me aplastaron contra la primera fila del escenario y bailé sudada con un montón de desconocidos durante una hora y 45 minutos.
No creo que haya nada mal con el rock. Se pasa por alto. Y ahora mismo, el actual clima musical no es muy diferente a como era en 1991, justo antes de que Nirvana se popularizara. Los finales de los 80 estuvieron plagados de pop sobreproducido sin nada a lo que los chavales pudieran agarrarse – no había manera de que conectaran con aquel ‘hair metal’ que cantaba sobre follarse a ‘streapers’ en una limusina en Sunset Boulevard. ¿Quien puede identificarse con eso? Luego tenías un montón de mierda pop de cantantes femeninas y la música era aburrida. Y entonces, un puñado de bandas de sucios chavales aparecieron en la MTV y el rock’n’roll volvió a ser grande. Y tengo la sensación de que eso está a punto de ocurrir. Tiene que pasar. No puede ser que el resto de nuestras vidas se reduzca a concursos de talentos en la televisión. No puede ser la misma ‘playlist’ en todas las radios el resto de nuestras vidas. No puede ser música hecha por ordenadores con gente hablando por encima el resto de nuestras vidas. No puedes ser así, no lo será.
Siento que como músico y como parte de la escena rock’n’roll que tengo una responsabilidad en hacer mierda real, no pensar en ninguna de esas otras gilipolleces, no pensar en hacer música por dinero o promocionar la música por moda, los concursos. Mi responsabilidad es hacer mierda real. Una vez empieces a hacer lo correcto, mejorará.
Alguien me preguntó recientemente, ‘¿Cual crees que es el problema de la industria musical?’ Y dije, ‘Coge el disco de Adele como ejemplo. Es un disco maravilloso y todo el mundo está conmocionado que sea tal fenómeno. Yo no. ¿Sabes por qué es grandioso ese disco? Porque es jodidamente bueno y es real. Cuando un artista canta sobre algo real y ella tiene un talento increíble, merece todos los premios que obtiene, es un disco genial. Imagínate ahora que todos los discos fuesen tan buenos. ¿Crees que solo uno de ellos vendería? ¡Joder, no! Todos lo harían. Si todos los discos fuesen tan buenos, la industria musical echaría llamas pero no es el caso. Mucha gente promociona discos que no son más que mierda de ‘tiralo-contra-la-pared-a-ver-si-se-pega’. Todo el mundo tiene la responsabilidad de hacer lo correcto y promocionar artistas que signifiquen algo.”

“Siempre habrá bandas de rock’n’roll, siempre habrá chavales a los que les encantarán los discos de rock’n’roll. Viajo por todo el mundo y toco música y es fácil pensar que el rock se ha marchada cuando estás en un país como América (del Norte). Justo volvemos de un viaje por el ‘Down Under’, hicimos una gira por Australia y Nueva Zelanda a la que llevábamos 40.000-50.000 personas por noche, llenando estadios. Eso significa que el rock’n’roll está sano y bien. Algo que nunca se irá es la conexión que haces con una banda o canción donde te conmueve el hecho de que sea gente real la que hace la música. Haces esa conexión humana con una canción como ‘Let It Be’ o ‘Long And Winding Road’ o una canción como ‘Bohemian Rhapsody’ o ‘Roxanne’, cualquiera de esas canciones. Suenan a gente haciendo música.
En América, el rock’n’roll no está en la primera página del ‘mainstream’ como en el resto del mundo. Inglaterra es otro país donde las bandas de rock tienen tremendo éxito: las oyes en la radio, tienen éxitos y tocan en estadios y parece casi como que (el rock) es más grande que nunca (por ahí). Pero, por la razón que sea, aquí en América no hay tanta atención para las bandas de rock’n’roll. No sé lo que es pero es uno de los pocos países donde el rock’n’roll no es gigantesco.”
Asegura que “una de las razones por las que seguimos siendo una banda y seguimos haciendo álbums y seguimos teniendo éxito es porque no prestamos atención a nada de eso. Tenemos nuestro propio estudio, nuestro propio sello y lo hacemos todo a nuestra manera y según nuestros principios. Para nosotros lo más importante es estar satisfechos en la banda y una vez terminamos de hacer un disco, se lo damos al resto del mundo. Pero siempre hemos vivido en esta preciosa burbuja que es Foo Fighters. No puedes reventarla, no puedes cambiar lo que hacemos porque tratamos que siga siendo real y puro. Hemos visto pasar toda clase de modas -nu metal, corbatitas- y seguimos con la cabeza gacha y haciendo lo nuestro durante tanto tiempo que nada de eso realmente importa y al final, lo que pasa es que acabamos haciendo álbumes con los que la gente conecta porque son discos reales.
Pero no, nunca ha sido un problema. Durante años, normalmente una vez al año, tienes una banda de rock que sale y dice, ‘Vamos a salvar el rock’n’roll’ y luego lees un artículo preguntándose, ‘¿Está muerto el Rock?’. Creo que nunca se irá. Pregúntale a los chicos de AC DC a ver si está muerto el rock’n’roll.
Debido a cosas como ‘American Idol’ y emisoras de radio que ponen música hecha completamente por ordenadores es fácil olvidar que hay bandas con gente de verdad tocando instrumentos de verdad que molan. No creo que para los fans vaya a irse nunca. No conozco a mucha gente que deje de escuchar rock. Joder, parece estar bastante vivo y bien.”
“Tienes que entender que somos una banda realmente simple,” prosigue. “Pensamos que somos una mierda y tratamos de hacer buenos discos y ensayamos. No nos sentimos como la banda más grande del mundo. Nos sentimos los cinco capullos que salían de gira en una furgoneta hace 17 años, eso no ha cambiado. Pero hubo un momento, hace 10 años, en que nos pedían tocar en una ceremonia de premios o en un festival de una radio o algo así y éramos la única banda de rock. Ahí estábamos en un cartel con artistas de pop como Pussycat Dolls o algún rapero nuevo y salíamos nosotros le sacábamos todo a los instrumentos.Y empecé a preguntarme, ‘¿Por qué estamos aquí?’ Me imaginaba si simplemente necesitaban ‘una banda de rock’ -’¿Cual es una banda de rock? Llamad a Foo Fighters’. Entonces empecé a pensar que quizá representemos algo para la gente, quizá cuando oyen el nombre Foo Fighters piensan en rock’n’roll y pensé, ‘Guau, eso mola’. Luego, con el paso de los años y conciertos, miraba al público y veía a chavales con camisetas de Nirvana y sus padres con camisetas de Foo Fighters -cosa que parece el mundo al revés- y veía mostachos y chavales en su primer concierto de rock. Nuestro público se hizo tan diverso que pensé, ‘Tío, solo quieren ver un concierto de rock’. Vete a ver a Bruce Springsteen. Vete a ver a Tom Petty, AC DC, Roger Waters, a cualquiera de ellos. Vete a ver a Pearl Jam o Soundgarden. Fui a ver a Soundgarden hace cuatro o cinco meses; no estuve en la zona VIP, me metí ahí dentro y me aplastaron contra la primera fila del escenario y bailé sudada con un montón de desconocidos durante una hora y 45 minutos.
No creo que haya nada mal con el rock. Se pasa por alto. Y ahora mismo, el actual clima musical no es muy diferente a como era en 1991, justo antes de que Nirvana se popularizara. Los finales de los 80 estuvieron plagados de pop sobreproducido sin nada a lo que los chavales pudieran agarrarse – no había manera de que conectaran con aquel ‘hair metal’ que cantaba sobre follarse a ‘streapers’ en una limusina en Sunset Boulevard. ¿Quien puede identificarse con eso? Luego tenías un montón de mierda pop de cantantes femeninas y la música era aburrida. Y entonces, un puñado de bandas de sucios chavales aparecieron en la MTV y el rock’n’roll volvió a ser grande. Y tengo la sensación de que eso está a punto de ocurrir. Tiene que pasar. No puede ser que el resto de nuestras vidas se reduzca a concursos de talentos en la televisión. No puede ser la misma ‘playlist’ en todas las radios el resto de nuestras vidas. No puede ser música hecha por ordenadores con gente hablando por encima el resto de nuestras vidas. No puedes ser así, no lo será.
Siento que como músico y como parte de la escena rock’n’roll que tengo una responsabilidad en hacer mierda real, no pensar en ninguna de esas otras gilipolleces, no pensar en hacer música por dinero o promocionar la música por moda, los concursos. Mi responsabilidad es hacer mierda real. Una vez empieces a hacer lo correcto, mejorará.
Alguien me preguntó recientemente, ‘¿Cual crees que es el problema de la industria musical?’ Y dije, ‘Coge el disco de Adele como ejemplo. Es un disco maravilloso y todo el mundo está conmocionado que sea tal fenómeno. Yo no. ¿Sabes por qué es grandioso ese disco? Porque es jodidamente bueno y es real. Cuando un artista canta sobre algo real y ella tiene un talento increíble, merece todos los premios que obtiene, es un disco genial. Imagínate ahora que todos los discos fuesen tan buenos. ¿Crees que solo uno de ellos vendería? ¡Joder, no! Todos lo harían. Si todos los discos fuesen tan buenos, la industria musical echaría llamas pero no es el caso. Mucha gente promociona discos que no son más que mierda de ‘tiralo-contra-la-pared-a-ver-si-se-pega’. Todo el mundo tiene la responsabilidad de hacer lo correcto y promocionar artistas que signifiquen algo.”

Review del concierto de Mudhoney y The Fluid en Denver

Review del concierto de Mudhoney y The Fluid en Denver

Sacado de http://blogs.westword.com/backbeat/2012/01/mudhoney-bluebird-denver-2012.php

Aunque el estado de ánimo de todas las cabeza de la multitud del Bluebird Theater anoche fue muy «Heavy», también fue algo agridulce–Mudhoney, Fluid y todos los fans de ambas bandas fueron reunidos para recordar a su amigo, el guitarrista de Fluid, Ricky Kulwicki, quien murió en febrero de 2011. Un concierto benéfico para los hijos adolescentes del Kulwicki (cuya banda,Purple Fluid, abrió el concierto), el Bluebird estuvo rebosante de apretones de manos y abrazos e historias compartidas entre viejos amigos. Mudhoney  pasó a través de la sede con una precisión calculada y gritos por todos lados, y en solo 6 días que llevaban de 2011, se establece como uno de los mejores espectáculos del año.

Purple Fluid abrió a un lugar medio lleno en el cual su mayoría eran padres y adolescentes, flashes de cámaras inundando lentamente la sala y el público poco a poco metíendose en el concierto. Los punks adolescentes estuvieron muy bien, participando con público con un montón de bromas posando al más estilo rockero. Covers de The Ramones «Commando» y «All My Friends Are Dead» del Tubronegro sonaron en la media hora y definieron muy bien, a lo largo del encendiendo del concierto con una energía nerviosa.

Tomo un momento para agradecer a la comunidad que se había reunido para Kulwicki y por su familia, Robinson expresó el agradecimiento por la compasión por el fallecimiento de su amigo, observando que Mudhoney habían conducido desde  Seattle ese día para tocar en el concierto de homenaje. Los recuerdos y las experiencias compartidas entre aficionados atestados al lado del otro en el bar, en la línea para el baño y el forro al pie del escenario fueron incorporadas en precursor del Fluid, el ardiente y apasionado evento principal de la noche.

Con un solemne pompa de  entrada, Mudhoney salieron de las cortinas del backstage modestos y establecieron inmediatamente su explosión de una hora y media larga en movimiento con «Poisoned Water». El cantante y la presencia del guitarrista Mark Arm inmediatamente yuxtaponen, como el larguirucho y modesto personaje que  pasó de tímido a maníaco siempre magnetizando su boca con el micrófono.

Compensado por el guitarrista Steve Turner haciendo movimientos irregulares a un lado y las sacudidas  suaves deel bajista Guy Maddison en el otro,  la energía inigualable de Arm siguió ráfaga adelante y se hizo presente a través de canciones como «Get Into Yours,» «Inside Job» y «F.D.K.» Sólo un puñado de canciones más y la multitud estaba en un completo frenesí, el escenario actúa como una barrera mínima entre el artista y el espectador–unas manos incluso llegaron a izar cuerpos en el aire antes de que la seguridad hábilmente sacase los pies y las cabezas de los surfistas de la multitud  y los pusiese hacia abajo.

LA embestida de Mudhoney hacia todos lados marchaba bien, prácticamente los ojos negros de Arm lanzaron hacia arriba desde detrás de su nariz pronunciada y resplandeciente Gretsch. «Sweet Young Thing Ain’t Sweet No More»» y el omnipotente «Touch Me I am Sick»  se sentían como reverberación recordatorio de que la banda que había diseñado la inteligencia que había sobrepasado cualquier falsas nociones del grunge como un fenómeno real.

Pronto, Arm se quito su guitarra y mike empezó a hacer espacio para su firma de depredador, de más doblado de medio cuerpo postura, «The Open Mind» y «Next Time» escupieron una amplia sonrisa entre espasmos y sacudidas. Una salida en falso para «Chardonnay» proporcionó un interludio cómico menor, pero la banda obligó a sí mismo derecho hacia el asalto sonic, estilo de loose cannon de Arm impregnó cada rincón de la sala. Terminarron bellamente dibujado por sangrado de «Tales Of Terror», Arm hacia el lado y apretó a un pasado ceremonial agitando su cadera antes de que Mudhoney terminasen.

Unos instantes más tarde, el Cuarteto fue volvió para un encore con otro mini-set en su manga. «If I Think» y «Here Comes Sickness» renovado  por el rol realizado fantásticamente por Arm, la multitud a sus pies ahora arremolinadas en un Estado agresivo por completo. Arm anunció anunció el legendario cover de  Mudhoney «traditional song from Texas»–«Hate The Police de The Dicks»–fue en homenaje al reconocimiento de la banda . Para poner fin a todo, la banda llegó a la multitud con Black Flag «Fix Me», y terminó la blitzkrieg.

In English

For  http://blogs.westword.com/backbeat/2012/01/mudhoney-bluebird-denver-2012.php

Though the mood hanging from the heads of the Bluebird Theater crowd last night was a heavy one, it was also bittersweet — Mudhoney, the Fluid and the bands’ mutual fans were gathered together to remember their friend, Fluid guitarist Ricky Kulwicki, who died in February 2011. A benefit concert for Kulwicki’s teenage sons (whose band, Purple Fluid, opened the show), the Bluebird was bursting with handshakes and hugs and stories shared between old friends. Mudhoney tore through the venue with a screaming and calculated precision, and at only six days into 2012, set the bar as one of the best shows of the year.

Purple Fluid opened to a half-full venue of mostly parent and teenager pairs, camera flashes flooding the scene as the crowd slowly trickled in. The teenage punks held their own, engaging the audience with plenty of rock posing and stage banter. Covers of The Ramones’ «Commando» and Tubronegro’s «All My Friends Are Dead» rolled the half-hour set along nicely, igniting the show with a nervous energy.

Not long after the Purple Fluid was finished, the Fluid appeared, the pit now teeming with long hairs, flannels and leather jackets, beer-clenching fists high in the air. Lead singer John Robinson sauntered on stage with an open bottle of wine, throwing the band into it’s set with arms open wide. He pushed at the crowd with a zealous yell, smiles and screams pushing back as the venue sang with him.

Dave Ingraham
Fluid at the Bluebird Theater. More photos of the Fluid at the Bluebird.

​Taking a moment to thank the community that had gathered for Kulwicki and his family, Robinson expressed gratitude for the compassion around their friend’s passing, noting that Mudhoney had driven in from Seattle that day to play the tribute show. The memories and experiences shared between fans crowded next to each other at the bar, in line for the bathroom and lining the foot of the stage were all embodied in the Fluid’s passionate and fiery precursor to the night’s main event.

With a solemn pomp of an entrance, Mudhoney walked out from the Bluebird’s modest backstage curtains and immediately set its hour and a half long explosion in motion with «Poisoned Water.» Lead singer and guitarist Mark Arm’s presence immediately juxtaposed itself, as the lanky and unassuming figure went from shy to maniacal whenever his mouth magnetized with the microphone.

mudhoney-denver-2012.jpg
Dave Ingraham
Mudhoney last night at the Bluebird. More Mudhoney at the Bluebird photos.

​Balanced out by guitarist Steve Turner’s jagged movements to one side and bassist Guy Maddison’s soft sways on the other, Arm’s unmatched energy continued to burst forth and retreat through songs like «Get Into Yours,» «Inside Job» and «F.D.K.» Just a handful of songs down, and the crowd was in a full-on frenzy, the stage acting as only a minimal barrier between performer and onlooker — a few hands even managing to hoist bodies into the air before security deftly pulled the feet and heads of crowd surfers down.

Mudhoney’s onslaught of fuzzed-out sludge marched on, Arm’s virtually black eyes darting upward from behind his pronounced nose and glittering Gretsch. «Sweet Young Thing Ain’t Sweet No More» and the omnipotent «Touch Me I’m Sick» felt like reverberating reminders that the band’s crafted intelligence had far surpassed any false notions of grunge as an actual phenomenon.

More photos: Mudhoney with Fluid at the Bluebird

Soon, Arm removed his guitar and mike stand to make room for his signature predatory, body-half-folded-over stance, «The Open Mind» and «Next Time» spitting from his wide grin between jerks and flails. A false start to «Chardonnay» provided a minor comedic interlude, but the band forced itself right back into the sonic assault, Arm’s loose cannon style permeating every corner of the venue. Finishing the beautifully drawn out bleed of «Tales Of Terror,» Arm turned to the side and squeezed out one last ceremonial hip shake before Mudhoney exited the stage.

A few moments later, the four-piece was back for an encore with another mini-set up its sleeve. «If I Think» and «Here Comes Sickness» reinvigorated Arm’s fantastically creepy stage persona, the crowd at his feet now swirling in a full-on aggressive state. Arm then smartly announced that Mudhoney’s legendary cover of a «traditional song from Texas» —The Dicks’ «Hate The Police» — was in homage to the band’s appreciation for roots music. To end it all, the band came at the crowd with Black Flag’s «Fix Me,» and the blitzkrieg was over.

Scott Weiland contribuye al cover hecho por The Glorious del «Help» de los Beatles

Scott Weiland contribuye al cover hecho por The Glorious del «Help» de los Beatles

Procedentes de la legendaria ciudad de Manchester, Inglaterra, Christopher Wicks y Mick Rossi conocieron en una fiesta de Navidad de Hollywood . Aunque los dos habían crecido cuadras entre sí y nunca se habían reunido, pronto descubrieron una pasión mutua por compañeros músicos de Manchester como The Verve, Oasis y The Doves. Ahora casi tres años más tarde, el glorioso dúo lanzará su álbum debut, Stories From A Fractured Youth a y exhibirán el sonido y la sensación de la música que aman.

The Glorious han tenido tanto tremendamente diversas y exitosas carreras antes de su reunión al auspicioso. Christopher Wicks, el letrista y diseñador de todas las cosas lavandería inglesa, nació en los años sesenta en Manchester, Inglaterra. En sus primeros años encontró consuelo esbozando recuerda que principalmente camisas, zapatos y guitarras y escuchar música en los muchos lugares de Manchester . Este pasatiempo preadolescente creció y terminó convirtiéndose en una carrera durante toda la vida diseñando vestuario masculino y femenino.

Moda y música han colisionado continuamente en la vida de Wick, como sigue produciendo productos para la colección de John Lennon de la ropa. También conserva los derechos de canciones de Lennon y McCartney para prendas de vestir y ha diseñado las líneas de la compañía de guitarras Fender y la Fundación de Jimi Hendrix. Christopher Wick también ha co-diseñado una marca de ropa con su amigo Scott Weiland de Stone Temple Pilots. Ahora, el amor del lavadero inglés fundador de la poesía y las letras le han dado el impulso necesario para armar un equipo de ensueño de rock n’ roll, resultando en The Glorious.

Actor, músico, escritor y el productor Mick Rossi comenzaron su carrera en Manchester, Inglaterra . Como un adolescente formó la banda punk británica de culto «Slaughter And The Dogs» que son considerados uno de los fundadores del movimiento punk rock en Gran Bretaña hoy en día. La banda ha tocado con los Sex Pistols, The Clash y los Talking Heads, entre otros. Rossi también ha escrito guiones con Gabriel Byrne, Joanne Whalley y Patrick Bergin. Algunos de sus proyectos más recientes son «played,» «2:22» y su última película, «A Kiss And A Promise» que él escribió con Philip Guzmán. Mick juega el papel principal de «David Beck» en la película, junto a Natasha Gregson Wagner. «Un beso y una promesa» fue dirigida por Philip Guzmán y producida por Lenny Bitondo y se estrenó en los cines 09 de septiembre de 2011.

Rossi volvió a  sus raíces musicales cuando asociándose con Christopher Wicks y juntos escribieron el álbum, Stories From A Fractured Youth. Las letras de Wick han demostrado que puede  ser el compañero ideal para melodías y los riffs de Rossi. Cada letra de la canción en el álbum narra una historia, cada riff en la guitarra, una melodía infecciosa con una ayudita de sus amigos que prestaron su talento musical con el álbum incluyendo Steve Jones de Sex Pistols, Billy Duffy de The Cult y Scott Weiland de Stone Temple Pilots. Weiland es también el chico de tapa y diseño ADN de inglés lavandería Scott Weiland colección y combinaciones mechas a cantar un dueto de Lennon/McCartney escribió canción «Help». Esta versión fue recompuesta por Rossi y trae un nuevo sonido inolvidable para la canción clásica y brillante.

In English

Hailing from the legendary town of Manchester England, Christopher Wicks and Mick Rossi met at a non-snowy Hollywood Christmas party. Although the two had grown up blocks away from each other and had never met, they soon discovered a mutual passion for fellow Manchester musicians such as The Verve, Oasis and The Doves. Now almost three years later, The Glorious duo will release their debut CD, Stories From A Fractured Youth and showcase the sound and feel of the music that they love.

The Glorious have both had tremendously diverse and successful careers before their auspicious meeting. Christopher Wicks, the lyricist and designer of all things English Laundry, was born a child of the sixties in Manchester, England. In his very early years he found solace by sketching what he remembers to be mainly shirts, shoes and guitars and listening to music at the many legendary Manchester venues. This pre-teen pastime grew and ended up becoming a life-long career designing men’s and women’s apparel.

Fashion and music have collided continuously in Wicks’ life, as he continues to produce products for the John Lennon collection of clothing. He also retains the rights for both Lennon and McCartney lyrics for apparel and has designed lines for the Fender guitar company and the Jimi Hendrix foundation. Christopher Wicks has also co-designed a clothing brand with his friend Scott Weiland of Stone Temple Pilots. Now, the English Laundry founder’s love of poetry and lyrics have given him the impetus to put together a dream team of rock n’ rollers, resulting in The Glorious.

Actor, musician, writer and producer Mick Rossi began his career in Manchester, England, as well. As a teenager he formed the cult British punk band Slaughter And The Dogs who are considered to be one of the founders of the punk rock movement in Britain today. The band have played with the Sex Pistols, The Clash and the Talking Heads amongst others. Rossi has also penned scripts with Gabriel Byrne, Joanne Whalley and Patrick Bergin. Some of his more recent projects are “Played,” “2:22” and his latest film “A Kiss And A Promise” that he wrote with Philip Guzman. Mick plays the leading role of “David Beck” in the film, opposite Natasha Gregson Wagner. “A Kiss And A Promise” was directed by Philip Guzman and produced by Lenny Bitondo and opens theatrically on September 9, 2011.

Rossi re-visited his musical roots when teaming up with Christopher Wicks and together they have penned the album, Stories From A Fractured Youth. Wicks’ lyrics have proven to be the perfect companion for Rossi’s melodies and riffs. Every lyric on the album tells a story, every riff on the guitar, an infectious melody with a little help from their friends who lent their musical talents to the album including Steve Jones of The Sex Pistols, Billy Duffy of The Cult and Scott Weiland of Stone Temple Pilots. Weiland is also the cover boy and design DNA of English Laundry’s Scott Weiland Collection and joins Wicks to sing a duet of the Lennon/McCartney penned song “HELP.” This version was re-composed by Rossi and brings a haunting new sound to the classic and brilliant song.